LA MAGIA DE CRECER JUNTOS. LOS AÑOS DE LA ESCUELA INFANTIL: LA EDAD DE LA IMAGINACIÓN

El tercer volumen de la colección para padres del siglo XXI que te ayudará a crear relaciones sanas, fuertes y duraderas con tus hijos. Centrado en la etapa de los 2 a los 6 años. Entre los dos y los seis años, el lenguaje y la imaginación de tu hijo se desarrollan a pasos agigantados. El mundo entero se abre ante sus ojos, un universo maravilloso con un incansable explorador en su centro: tu hijo. Tu labor principal será crear un marco para su vida cotidiana mientras cuidas y fortaleces el vínculo entre vosotros. La educación durante estos años será más exigente, pero este libro te ayudará a encontrar las pequeñas herramientas que necesitas. Es justo ahora que debéis construir esa sensación de seguridad que tu hijo llevará consigo durante toda su crianza y edad adulta. En esta tercera entrega, la psicóloga y terapeuta familiar Hedvig Montgomery te acompañará para que puedas responder a las preguntas que te rondan por la cabeza: - ¿Qué es una buena educación? - ¿Qué importancia tiene que mi hijo haga amigos? - ¿Cómo gestiono las peleas entre hermanos? - ¿Cómo respondo ante los nuevos sentimientos que afloran? Reseñas:
«Los consejos de Montgomery son reflexivos, lógicos y claros. Cualquier persona inmersa en la educación infantil sabe que puede ser difícil en el día a día, por eso estas herramientas prácticas son tan necesarias.»
MDR Kultur «Conocer las necesidades de los niños y algunas características del desarrollo infantil pueden ayudar a los padres a tomar las mejores decisiones para toda la familia. Precisamente, eso es lo que explica el éxito de ventas de Hedvig Montgomery.»
Brigitte «Para criar a niños independientes, con autoestima y con un sentido de pertenencia, Montgomery nos cuenta cuál es el requisito previo para lograrlo: conocerte mejor a ti mismo para poder acercarte a tu hijo. Además, en La magia de crecer juntos la terapeuta comparte sus experiencias familiares y nos guía en el camino de construir un vínculo seguro con nuestros hijos.»
Habertürk